Tema 32. Antitusígenos.
1. Antitusígenos opiáceos
Los antitusígenos opiáceos tienen acción sobre el centro de la tos, aunque también hay evidencia de su efecto a nivel periférico. La mayoría de los opioides tienen actividad antitusígena pero los riesgos derivados de su utilización exceden sus beneficios, por lo que su utilización para este fin está restringida a unos pocos.
La codeína es el fármaco antitusígeno más utilizado y sirve de referencia para otros fármacos. Los efectos adversos más habituales son:
• Sedación
• Trastornos gastrointestinales.
• Depresión respiratoria al administrarse en dosis altas.
Esta depresión respiratoria puede aparecer en pacientes ancianos, asmáticos y pacientes con EPOC. Por este motivo, en estas circunstancias debe usarse con precaución la codeína, así como en pacientes con insuficiencia respiratoria, cardiaca, renal o hepática, hipotiroidismo, esclerosis múltiples, colitis ulcerosa y colecistopatías.
Está considerado como un fármaco de categoría C para su uso durante el embarazo y debe evitarse su consumo, especialmente a dosis altas durante la lactancia. El consumo de alcohol y otros depresores puede aumentar los efectos adversos. No se recomienda su uso en recién nacidos ni en menores de dos años. El efecto antitusígeno se logra con dosis inferiores a las necesarias para lograr el efecto analgésico.